CEDER Merindades

El Camino Natural Santander-Mediterráneo por las Merindades mantiene su ejecución en los plazos previstos

Descripción: 

Centro de Desarrollo Rural Merindades. Área de Comunicación. 20 de noviembre de 2020


 

Tragsa ha continuado con la realización de las inversiones en el trazado en todo momento desde el inicio de las mismas.
 

En el desarrollo de sus funciones para conseguir que se desarrollen proyectos de futuro en las Merindades, el CEDER viene trabajando incansable y prudentemente por la ejecución del Camino Natural Santander-Mediterráneo por las Merindades, un proyecto de 61 kilómetros y casi 6 millones de euros para nuestra comarca. En este tiempo han sido muchas las informaciones, noticias y comunicados que desde distintos ámbitos se han emitido con mayor o menor carácter especulativo o incorrecto.  Por ello, y con el trabajo hecho entendemos adecuado dar traslado de información veraz y cierta a la población y entidades del territorio para transmitir la tranquilidad y calma que la actual, normal y adecuada ejecución de un proyecto tan significativo como este merece.

Ya en 2003, desde el CEDER Merindades se comenzó a trabajar para que la comarca de las Merindades pudiese disfrutar de un Camino Natural (Vía Verde entonces), aprovechando el trazado desafectado en aquel momento del ferrocarril Santander-Mediterráneo a su paso por el norte de Burgos. Para ello, redactó un proyecto de la mano del área de Vías Verdes de la Fundación de Ferrocarriles Españoles, concretó con ADIF el arrendamiento de la traza y comenzó la búsqueda de financiación en el Ministerio de Medio Ambiente en aquel momento, en el año 2008. El proyecto se planteó junto al tramo de la Bureba, en una cooperación de ambas asociaciones de desarrollo para dar mayor relevancia a la iniciativa, y la ejecución del trazado dio comienzo en este tramo del territorio vecino, un trazado más corto (43 kilómetros) y con menos infraestructuras y dificultades constructivas (puentes, túneles, trincheras….) que el de las Merindades, en 2011, finalizándose en 2018.

Las dificultades presupuestarias resultado de la crisis provocaron el retraso en la finalización de ese primer tramo, y con ello también el inicio de la ejecución del tramo por las Merindades. No obstante, durante el año 2018, tras renovar el acuerdo con ADIF, el interés del CEDER Merindades y los ayuntamientos del trazado, y la voluntad del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación terminaron con la actualización del proyecto de ejecución y el inicio de las tan esperadas obras de adecuación de este camino natural por nuestra comarca. Unas obras que iniciadas a principios de 2019 contemplan, como en su día indicó el Ministerio, un plazo de ejecución de 36 meses, y que se han visto afectadas por la pandemia, lo que ha supuesto un parón de más o menos 4 meses de ejecución, o lo que es lo mismo su finalización podría preverse sobre el plan inicial a mediados de 2022. Un proyecto importantísimo para las Merindades en el que la inversión estimada supone casi 6 millones de euros para las Merindades.Un proyecto muy esperado y que estamos convencidos vendrá a vertebrar una oferta turística alternativa muy interesante, a la vez que un nuevo recurso para el ocio de la población local, cumpliendo esa doble funcionalidad tan interesante de este tipo de proyectos.

Dicho proyecto de Camino Natural, a su paso por el municipio de Oña, en concreto en una parte de su paso por la Finca de la Santé, y en respuesta a la única petición de desvío que se recibió en la fase de redacción del proyecto en todo el recorrido en las Merindades,  se desviaba hacia el río Oca, atravesándolo en dos ocasiones en un trazado que suponía un destacado interés y belleza naturales que permitirían disfrutar de dos nuevas pasarelas sobre el Oca similares a las que se encuentran unos metros más arriba en el paseo realizado por el Espacio Natural Montes Obarenes y que tan buena acogida han tenido entre los/as usuarios/as del mismo. Dicho recorrido, fuera de la traza original del ferrocarril, contaba en el momento de su propuesta y redacción, con los permisos favorables tanto de la Confederación Hidrográfica del Ebro como de la Dirección General de Carreteras dependiente del entonces Ministerio de Fomento y el acuerdo de las partes implicadas.

En esa línea, en la actualidad seguimos trabajando en resolver, las ahora si, con las obras en ejecución, multitud de peticiones por parte de ayuntamientos, particulares (agricultores/as, ganaderos/as, ….), empresas, al respecto de tramos de cruces, pasos,…. que están surgiendo en un trazado de casi 61 kilómetros de longitud. Buscando en cada uno de esos casos la mejor solución para todas las partes, siempre sin desvirtuar el Camino Natural.

Iniciadas las obras a principios de 2019, y en el momento actual de abordar dicho desvío como se recogía en el proyecto de ejecución, se ha detectado por parte de la empresa encargada de su ejecución, TRAGSA, y del propio Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, encargado de la ejecución de las obras, que las inversiones previstas sobre el río Oca podrían encontrar dificultades para obtener la actualización de los permisos necesarios por parte de la CHE, tal y como están planteadas en el proyecto de ejecución, habida cuenta de las mayores restricciones establecidas en estos años al respecto de este tipo de intervenciones sobre los cauces de los ríos. Por ello, una vez recibida esta información desde el Ministerio en julio de este año, tras evaluar detenidamente la nueva situación y los posibles inconvenientes surgidos, algo muy habitual en obras de esta envergadura, y de acuerdo siempre con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación a través de la Dirección General de Desarrollo Rural, Innovación y Formación Agroalimentaria, y la propiedad de la Finca de la Santé, que en todo momento ha mostrado su mejor disposición para con el desarrollo del proyecto y la búsqueda de la mejor ejecución del mismo, se ha determinado que, a pesar de que el desvío tenía un innegable interés natural y paisajístico, las dificultades surgidas en la actualidad aconsejan, para evitar cualquier retraso, a pesar de que aún quedan casi 18 meses de ejecución, redefinir el trazado por el recorrido originario de la traza del ferrocarril. Una decisión tomada de acuerdo a los criterios técnicos y de ejecución que en este momento se han puesto de manifiesto como más operativos y ejecutivos.

Atendiendo, además, al extraordinario interés que todas las partes implicadas en dicha decisión tienen en que este proyecto tan ansiado por todos, y en el que todo el territorio hemos puesto de nuestra parte, sea una realidad lo antes posible y una oportunidad para la mejor la oferta turística, los servicios a la ciudadanía, así como esperamos y trabajaremos por ello, un impulso al desarrollo de iniciativas empresariales y de empleo vinculadas al mismo.

Desde la presidencia del CEDER, Nuria Ortiz, ha señalado que “lamentamos profundamente la inquietud que las informaciones aparecidas hayan podido causar, y el temor a que el Camino Natural no se ejecutase. Un hecho, que nunca ha estado en cuestión, las obras no se han detenido en ningún momento, ni se ha planteado la no ejecución de ningún tramo del trazado, como nos ha puesto de manifiesto el Ministerio en los contactos con el. Nosotros hemos seguido, como desde el principio, trabajando, que es lo que nos toca, trabajar e impulsar proyectos, para solventar cualquier dificultad en la ejecución: desvíos, autorizaciones de cruces, permisos de obra, medioambientales, ……., y en eso vamos a seguir hasta que en el 2022 podamos dar por finalizada la obra e inaugurado su uso para todas las personas de las Merindades y nuestros visitantes”.